
El diamante es una herramienta de corte única y altamente efectiva que se ha convertido en una opción popular para aplicaciones de mecanizado que requieren precisión y resistencia al desgaste. Esta herramienta se fabrica a partir de diamante sintético, que tiene una dureza excepcional y una resistencia excepcional al desgaste. El diamante se utiliza principalmente para mecanizar materiales extremadamente duros como cerámica, vidrio, piedra y materiales compuestos. Además, el diamante también es una excelente herramienta para mecanizar aluminio a alta velocidad y producir acabados superficiales precisos.
Es importante tener en cuenta que el diamante no es adecuado para mecanizar acero debido a la reacción química que se produce entre el hierro y el carbono del acero y el carbono presente en el diamante. Esta reacción a alta temperatura resulta en la transformación del diamante en grafito, lo que hace que pierda su dureza y resistencia al desgaste. Por lo tanto, el diamante no se utiliza como herramienta de corte para mecanizar acero y se prefiere en su lugar herramientas de carburo de tungsteno o cerámica para esta tarea.

A medida que la demanda de piezas más precisas y complejas sigue aumentando, el uso del diamante como herramienta de corte sigue creciendo en popularidad. Sin embargo, es importante tener en cuenta las limitaciones y los costos asociados con el uso del diamante como herramienta de corte antes de elegirlo para una aplicación específica. Aunque el diamante es una herramienta de corte altamente productiva, su precio es significativamente mayor que el de otras herramientas de corte convencionales. Por lo tanto, se recomienda evaluar cuidadosamente la aplicación antes de decidir utilizar el diamante como herramienta de corte.
A pesar de su alto costo, el diamante sigue siendo una herramienta de corte popular debido a sus muchas ventajas en comparación con otras herramientas de corte convencionales. El diamante es altamente resistente al desgaste y a la deformación, lo que significa que puede cortar materiales a altas velocidades sin sufrir un desgaste significativo. Esto se traduce en un mecanizado más rápido y una vida útil más larga de la herramienta de corte. Además, el diamante también tiene una capacidad excepcional para producir acabados superficiales precisos y reducir la necesidad de operaciones de acabado adicionales.
En resumen, el diamante es una herramienta de corte altamente efectiva que ofrece una precisión excepcional y resistencia al desgaste en aplicaciones de mecanizado que implican materiales extremadamente duros. Sin embargo, es importante recordar que el diamante no es adecuado para mecanizar acero debido a su reacción química con el hierro y el carbono del acero. A pesar de su alto costo, el uso del diamante como herramienta de corte sigue creciendo en popularidad a medida que aumenta la demanda de piezas más precisas y complejas.
Fuente: «Machining with Diamonds: An Overview»
Industrial Diamond Review